20 Abr Noticia de impacto. Sangre entre los escaños. Cap. 5.

Continuamos esta saga en la que cuento con la inestimable colaboración de mi amigo Antonio Arenas.

Los periodistas que protagonizan la historia, Mateo Santesmases y Ploteo Hermida, deciden apostar fuerte y toman una decisión que puede resultarles más que arriesgada.

Hay uno o varios complots que se están conjugando para llevarles a sospechar que el enemigo y asesino múltiple de las dos promesas del partido de los granates se podría encontrar entre las filas de estos. Un editorial devastador publicado por Mateo y Ploteo se abre paso con voracidad entre todos los medios de comunicación de masas.

Ver capítulo anterior.

Sangre entre los escaños

Capítulo 5. Noticia de impacto

Al gran periodista italiano Indro Montanelli, muerto en 2001 a los 92 años, luchador infatigable durante décadas contra los mafiosos gobiernos de la República Italiana, le habría encantado seguir vivo aquella mañana para leer, con una franca sonrisa de satisfacción, el editorial de un diario extranjero de segunda división con el que dos plumillas de tercera iban a liarla parda.

El editorial dice así:

“En épocas que se nos antojan muy lejanas, contemplábamos cómo en la vecina Italia era habitual que la política y los asuntos de la mafia estuvieran absolutamente mezclados. El llamado “compromiso histórico” entre los capos sicilianos y el partido de la Democracia Cristiana, permitió que durante décadas este último gobernara el país, en gran medida gracias al apoyo en forma de votos y financiación ilegal recibidos de la Cosa Nostra, la cual obtuvo a cambio protección y múltiples favores políticos. Esta podrida situación fue el detonante del secuestro y posterior asesinato del líder demócrata-cristiano Aldo Moro, ocurrido en 1978.

Aquí estábamos por aquel entonces despertando a la política en libertad y éramos aún muy ingenuos. Todo lo que sucedía en Italia nos era absolutamente ajeno. Pero los años pasan deprisa y las situaciones cambian casi sin darnos cuenta. La corrupción, el soborno y el asesinato impune campan hoy a sus anchas por nuestro país.

Y sí, nos referimos al supuesto asesinato de María Rojas a manos de su amante Ernesto Mocentes. Lo que parecía un caso de violencia de genero ha tornado en escándalo político que apunta a la más alta magistratura del Estado.

Las pruebas están aún por llegar, pero sin duda aparecerán. Mucho tendrá que explicar entonces nuestro actual presidente del gobierno y líder omnímodo del Partido Granate. La Ley Electoral, que impide más de cuatro mandatos continuados, obligó a nombrar a regañadientes a Ernesto Mocentes nuevo candidato a la presidencia del gobierno. Un candidato joven, con garra, incómodo para una cúpula con multitud de intereses creados, putrefacta hasta la médula, incapaz de abandonar sus poltronas.

Nuestro olfato periodístico nos conduce a dirigir la autoría de los dos terribles asesinatos cometidos en las últimas horas hacia la sede de Ferreras. De todos es sabido quién y de qué manera resuelve allí los “asuntos” problemáticos. Nos atrevemos a proclamar a los cuatro vientos que los recientes asesinatos forman parte de un plan orquestado desde la cúpula del partido que sostiene al gobierno, y que los cerebros de la trama son su máximo líder, el presidente Nadal, y su fiel lacayo, el bachiller Abdón Monegal. Para demostrar lo que decimos, estamos dispuestos en este diario a dedicar hasta el último de nuestros alientos”.

Editorial del “Heraldo del Tiempo” fechado el día en que Mateo y Ploteo decidieron jugarse el pescuezo.

(Marcos):

Todas las cadenas de televisión se hicieron eco de la gran noticia, algunas con un matiz claro que coloreaba el contenido en función de su adscripción política, mejor dicho, de su pagador más generoso.

“Cadena libre” era la emisora de TV que se mostraba algo más imparcial en sus emisiones:

–“Un torrente de reacciones se ha producido en todos los medios al ser publicado el editorial del “Heraldo del Tiempo”, un periódico regional que ha lanzado una bomba informativa muy detallada sobre la supuesta implicación del candidato a la presidencia por el partido Granate Ernesto Mocentes, en el asesinato de la diputada por los granates María Rojas. Todas las pruebas acumuladas por la división de criminalística de la Policía Nacional parecen apuntar a Mocentes como presunto culpable del luctuoso suceso.

Será la UCO de la guardia Civil quien actúe para comprobarlas una a una en una investigación iniciada hace dos días. A esto hay que añadir el crimen cometido en la misma sede de los granates de la calle Ferreras, que ha puesto en jaque la credibilidad y el buen gobierno del partido al que pertenece el presidente Prometeo Nadal. El cadáver de Ernesto Mocentes fue encontrado en el interior de un ascensor de la sede. Todos se preguntan qué está sucediendo entre bastidores dentro del partido Granate.

El Alto Tribunal tomará las diligencias oportunas cuando, una vez reunidas las pruebas, sea presentada en el juzgado de lo penal la solicitud de investigación de este caso en el que la víctima parecía ser presunto culpable del primer crimen. El partido Diestro ya ha anunciado que se encargará de solicitar la investigación de estos hechos.

Los celestes en ese sentido no han anunciado nada.

–Este bombazo informativo se puede complicar más de lo que habíamos estimado –comentaba el Secretario de Estado y del partido Granate, Eurípides Pascal a un despreocupado Abdón Monegal, quien no parecía lamentar ninguno de los dos asesinatos tan próximos en el tiempo.

Ambos conversaban en el bar “Nostromo”, un centro habitual para las reuniones de allegados al partido granate, cercano al Congreso de los Diputados.

–La segunda víctima ha sido nuestro principal sospechoso y su muerte ha ocurrido en nuestra sede política, no podemos dejar que se nos vaya de las manos. ¿Tienes previsto cómo salir al paso de todo ante la prensa, Abdón?

–¿Ante qué prensa? ¿Esa que calla sabiendo a conciencia que si abre la boca dejará de recibir subvenciones? Sabes que ahora más que nunca los medios están en crisis económica por la tendencia del público a escuchar noticias en canales “on streaming”. “Youtube” es en ese sentido lo más solicitado. Internet lleva mucho tiempo echando humo por la elevada audiencia que consiguen esas plataformas y se está cargando a esos inútiles de las cadenas en abierto. Para estos, somos casi la mitad de sus beneficios junto a los que obtienen por publicidad, su principal fuente de ingresos.

–“Entretiene, forma opinión y cohesiona sociedades”, este es el lema de la televisión abierta ¡ja, ja, ja! Ese es el mejor modo de domesticar al pueblo, pero se nos acabará el chollo y a ellos también, porque la gente está empezando a usar la cabeza al desconectar de la televisión convencional y pasarse al “streaming”.

–¿Y eso te divierte? –ironizó Eurípides–. Podemos vernos en un aprieto mayúsculo si el pueblo se distancia de nosotros, la pérdida de votos sería inasumible…

–Déjate ya de votos. El presidente sabe lo que hace y es en este punto donde sacaremos un arma arrojadiza contra la oposición que no va a saber cómo pararla.

–Ah, pues yo no estaba al tanto de nada ¿Y qué hará el presidente? –quiso saber Eurípides.

–Prometeo va a disparar un misil al mismo corazón de los celestes acusándoles de juego sucio por ser ellos los responsables de las dos muertes.

–¡Pero eso es un disparate! ¿Quién se va a creer que el partido que dirige Félix Sotogrande ha sido capaz de llegar a tanto?

–Pues mediante una campaña de acoso mediático sin precedentes –aclaró Abdón–, que ponga al señor Sotogrande bajo presión a diario. Verás como la parte más boba del pueblo acaba creyéndolo y lo refleja en próximas encuestas.

–Ajá, ya veo, la táctica de dar la vuelta a la tortilla. Bueno, ya veremos hasta dónde llega el escándalo.

–Y si no es suficiente para acortar distancias de intención de voto con los celestes, echaremos mano de nuestro querido director del Centro Nacional de Encuestas. Ya verás cuánto nos favorecerán los resultados.

–Eso no es nuevo para mí, Abdón. ¿Me tratas como a un retrasado?

–Emilio el encuestero nunca decepciona. Cocina resultados desde hace mucho para uso exclusivo de lo que pida el presidente y ha conseguido enderezar tendencias de opinión que nunca nos habrían beneficiado.

–¡Yo mismo estuve con él en la cocina para arreglar los resultados de encuestas antes de las últimas elecciones! ¡Me estás sacando de quicio!

Para Abdón, esa ofuscación que mostraba Eurípides acababa de revelarle que el presidente había preferido a este vociferante interlocutor antes que a él para llevar adelante el cocinado. Y esto no era del agrado de Abdón, que pretendía participar cada vez más en las intrigas del partido Granate y se creía mejor que nadie.

–Bien, Eurípides, bien… –es lo último que dijo antes de abandonar la estancia.

Y hasta aquí llega el quinto episodio de esta saga. No os perdáis el capítulo siguiente.

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Te deseo salud y suerte en la vida.

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