Hola a tod@s. Os dejo en este post el microrrelato con el que participo en la convocatoria de este jueves siguiendo el reto semanal. Lo ha organizado MOLÍ DEL CANTER . Os recomiendo su blog que es una maravilla.
El contenido del relato debe inspirarse en las siguientes premisas:
¿Que tiene noviembre que lo hace diferente de los otros meses? ¿Son las castañas calientes y los boniatos? ¿Es ese frío que no acaba de llegar? ¿Es ese inicio en el que homenajeamos a aquellos que han partido para siempre? o ¿Es la alegría desbordante de Halloween?
Como siempre, intentaré no superar las 350 palabras. Y bien, el microrrelato está servido…
Un noviembre diferente
David mantenía en su memoria el esplendor azul de las hortensias frescas sembradas en el macetero de su ventana. Los cristales de esta quedaban empañados por el aliento del joven cuando las observaba para comprobar si les faltaba el agua. Cada mes de noviembre iniciaba el mismo ritual: un paseo por el bosque vecino para recoger castañas ¡deliciosas recién asadas!, una visita al camposanto donde rezaba ante la tumba de sus padres y vuelta por el pueblo para saludar a los conocidos que se cruzaban con él.
–¡Felicidades Manuel! ¿Cómo van a llamar a tu último nieto?
–¿Qué tal Susana? Gracias por tu tarta de manzana con miel. Estaba deliciosa. Ojalá y yo pudiera cocinar así,
–¿Cómo va tu grupo de teatro, Andrea? Dime cuándo será el siguiente estreno.
–Qué bien arreglaste mi moto, Eustaquio. Ahora va como la seda.
El optimismo de David es proverbial, siempre se mantiene a flote ante la adversidad.
Este mes de noviembre además es especial, porque está postrado en su casa sin salir debido a alguna lesión que no quería recordar y eso le ha animado a leer mucho, actividad que tenía casi olvidada. Lovecraft, Stephen King, Shirley Jackson… engrosaban sus estanterías de libros favoritos, que ahora disfrutaba más que nunca debido a su situación.
David esperaba una pronta recuperación y poder abandonar la casa en breve. Al menos disponía de una despensa privilegiada repleta de alimentos no perecederos que le había costado bastante llevar hasta allí.
Una explosión repentina tuvo lugar no muy lejos de esa casa donde su imaginación vagaba por otra dimensión, un mundo paralelo donde ignoraba la realidad de una guerra que llevaba ya dos años repartiendo destrucción.
Los mismos que llevaba David sin poder visitar la tumba de sus padres, ni degustar las gozosas castañas asadas o pasear por el bosque. Tampoco pudo en ese plazo de tiempo macabro cruzarse con nadie en el pueblo.
Pero él sabía que aquello acabaría tarde o temprano, aunque de momento su casa había quedado reducida a la planta sótano, desde donde resultaba imposible ver las hortensias.
Bueno, pues hasta aquí hemos llegado en el reto de este jueves 2 de noviembre e 2023. Haz click en el corazoncito de más abajo si te ha gustado.
Tu opinión la valoro mucho y me ayuda a mejorar. Deja por favor un comentario.