21 Abr La mujer duplicada
La mujer duplicada es mi aportación al reto literario de este jueves titulado «Homenaje a la literatura»
Ella trabajaba en una multinacional y se sentía un engranaje más. Embebida en la macroestructura de una especie de barco crucero de doce plantas y ocho mil pasajeros donde ninguno sabe nada del que tiene al lado mediante una conversación; tan solo por lo que piensa de él o ella. Cremoria es un buen peón, obediente y enfocada en la dirección única que le marcan sus superiores. El barco es de proporciones enormes, tan es así que es fácil que quien tengas al lado no sepa absolutamente nada del trabajo que estás haciendo, como si no haces nada en absoluto.
Lo que Cremoria adoraba eran los libros. Por sus manos habían pasado todo tipo de títulos, desde El lazarillo de Tormes (Anónimo), La Celestina (Fernando de Rojas), La vida es sueño (Calderón)… hasta La larga marcha (Stephen King), Todo por una chica (Nick Hornby) o la colección de novelas de Mary Higgins Clark. Recientemente había decidido que la empresa no se merecía que le dedicara tantos esfuerzos y resolvió que debía cumplir estrictamente con el horario laboral y volver antes a casa para escribir su propia obra.
Si, estaba convencida, había un tema que le rondaba la cabeza desde hacía tiempo y era la clonación de seres humanos. Esa era una historia que había ido tomando forma en su agitada imaginación y este era el momento ideal para llevarla a cabo. El protagonista sería alguien que se ocuparía de sus obligaciones en el trabajo mientras ella disfrutaba de la vida como nunca.
Así que Cremoria decidió recopilar información para su novela acudiendo a su gran amigo Aldonio Arenor, un prestigioso científico que llevaba años desarrollando embriones humanos para tratamientos de infertilidad. Aldonio optó por la vía rápida.
—Mira, Cremoria, tengo algo en las reservas criogénicas de este centro de investigación que seguro te va a interesar. Se trata de embriones clonados. De cualquiera de ellos puede nacer un ser humano tras su implantación en un útero artificial.
—¿Pero son clones perfectos del original? ¿Sin taras?
—Claro que sí, pasa a ver…
Aldonio condujo a su amiga al reducto donde la ciencia había conseguido imponerse a la Creación. Era el santuario de los proyectos prohibidos, donde imperaba una atmósfera de violación de las normas éticas que se atravesaría en la mente de cualquier ciudadano sujeto a creencias morales.
Cremoria miró alternativamente a su amigo y a las cápsulas donde no menos de una docena de clones se acumulaban en sus habitáculos nutricionales.
—¿Y cuánto tardan en estar listos para funcionar como humanos adultos? —inquirió la mujer con un brillo de codicia en sus ojos.
—Eso es lo mejor de todo, amiga mía. La gestación artificial dura menos de un mes ¿Necesitas, quizá, una copia clónica? Te la regalo, querida.
Tres segundos tardó Cremoria en contestar.
—La necesito antes de un mes.
Y hasta aquí hemos llegado, amig@s. No olvidéis dejar vuestro comentario, que para mi es importante, y vuestro like si os ha gustado.
Esta es mi participación en la convocatoria que ha organizado elvicisolitari para el reto literario de este jueves titulado:
HOMENAJE A LA LITERATURA
El 23 de abril es un gran día para los amantes de los libros en general y de la literatura, poesía, teatro o cualquier otra disciplina en particular. Se trata de la festividad de Sant Jordi, fecha en la que se conmemora también el DIA INTERNACIONAL DE LIBRO.
A partir de la ilustración indicada, del artista Lluis Rizzo Rey, hay que idear un escrito, en prosa o verso, con una extensión de unas 350 palabras y que gire en torno al mundo de los libros y la literatura, tanto en su lectura como escritura y lo que sus ilustraciones nos sugieran.

Crédito imagen: Lluis Rizzo Rey – «Rosa de Sant Jordi» publicado aquí.
Federico Agüera Cañavate
Posted at 19:13h, 10 mayoTu historia necesita ahora continuación: Qué hará la protagonista con su clon?
marcosplanet
Posted at 21:24h, 10 mayoPor supuesto que hay continuación, lo que pasa es que tengo muchos relatos abiertos y no me da la vida…
Saludos!
Miguelángel Díaz
Posted at 20:00h, 02 mayoCómo ha resuelto su problema, Marcos. A grandes males (deshumanizados), grandes remedios (nada éticos).
Un fuerte abrazo:-)
Maria
Posted at 19:27h, 26 abrilHola, Marcos, ya estoy por aquí, después de mi obligada ausencia, disfrutando de la lectura de tu relato, a ver si me voy poniendo al día y puedo ir participando también yo, porque me encantan los relatos jueveros.
Has desarrollado muy bien el relato en el tema del homenaje a la literatura, con la clonación. Por cierto, me parece muy original el nombre que la has puesto Cremoria. Una mujer que había leído muchos libros. Y enumeras unos cuantos, bien buenos por cierto.
Qué bueno que alguien se ocupara de sus obligaciones mientras ella disfrutaba de la vida, sí que tuvo buena idea.
Me has tenido embobada leyendo tu relato, me ha encantado, pero jolines me has dejado con ganas de leer más, espero la continuación, a ver qué pasa.
Que tengas un feliz fin de semana.
Un abrazo.
marcosplanet
Posted at 19:43h, 27 abrilBienvenida de nuevo, María. Bueno, las continuaciones son peligrosas porque dan paso a historias más largas y luego acabas sin tener tiempo para terminarlas. Muchas gracias por tus palabras y un fuerte abrazo.
Gabiliante
Posted at 14:32h, 26 abrilAhora necesita otro clon que le escriba la novela y ya podrá quedarse descansada. Igual en paz, porque ya no será necesaria.
No tardará en llegar la rebelión de los clones.
AbrZooo, Marcos
marcosplanet
Posted at 19:40h, 27 abrilNo, no creo que escriba su clon la novela, ella no se lo permitiría porque escribir sí que le gusta, al contrario que trabajar en exceso.
Puede que estemos más cerca de eso que dices de lo que crees.
Abrazos.
Chelo
Posted at 17:26h, 25 abrilA mí me intriga para qué querría una copia clónica. Seguro que los más jóvenes ven como este hecho se convierte en realidad.
Buen relato. Un saludo.
marcosplanet
Posted at 11:09h, 26 abrilEn principio, para hacer lo mismo que el protagonista de la novela que iba a empezar a escribir: «El protagonista sería alguien que se ocuparía de sus obligaciones en el trabajo mientras ella disfrutaba de la vida como nunca». Aunque la historia puede tomar otros derroteros.
El Demiurgo de Hurlingham
Posted at 04:22h, 25 abril¿Y si Cremoria, la protagonista, no es la original?
Y resulta que es una clon, sin saberlo.
Saludos
marcosplanet
Posted at 11:20h, 25 abrilNo podría ser porque se trata del primer clon encargado para ella, que es la original. El amigo científico tenía otros encargos pero ese provenía del original. Cremoria dará lugar, en menos de un mes, a su copia.
Saludos.
Neogeminis
Posted at 03:49h, 25 abrilLos límites éticos que deberían regular la exploración científica deberían acordarse y respetarse a nivel global. Existen, en realidad, pero con las nuevas tecnologías y la sobrevaloración del individuo por sobre el valor colectivo, la tentación de creerse dioses está a un paso de romper todas las barreras morales. Cada vez estamos más cerca de considerar la vida y el ser humano como una cosa, Una mercancía factible de ser negociada
marcosplanet
Posted at 11:24h, 25 abrilSi, como tantas otras consideraciones, habría que incluir la clonación entre las faltas de ética, como permitir que en partes del mundo desfavorecidas por la suerte y por gobiernos fanáticos estén matándose unos a otros en guerras sin fin, mientras los que venden armamento alimentan esas guerras. Y todos viendo la tele mientras…
Gustab
Posted at 03:05h, 25 abrilEs curioso, yo quisiera lo mismo para mi… pero tengo miedo, porque soy celoso…porque conociéndome yo mi clon tendría los mismos gustos… podría ser que perdiera mi vida. jajaj
marcosplanet
Posted at 11:24h, 25 abrilPodría ser, si. Creo que los clones nos duplicarían el ego también, y eso es peligroso.
Anónimo
Posted at 15:18h, 24 abrilMe he quedado con ganas de saber qué pasó, has cortado la historia en lo más interesante, ¡qué malillo eres!
Con lo que nos interesaría a muchos tener un clon…
marcosplanet
Posted at 11:32h, 25 abrilJa, jajaj, la historia continuará, no te quepa duda.
M. Cristina
Posted at 07:39h, 24 abrilMe la imagino observando a su clon desde una cámara oculta, Mientras ella, desde el sofá de su casa, tomándose un aperitivo, va escribiendo sobre quien le va a permitir vivir sin trabajar. Alucinante.
marcosplanet
Posted at 07:52h, 24 abril¡Así es! ja,ja,ja. Sillón y buenos alimentos o lo que le dé la gana hacer. Y si además cumple con la ilusión de su vida que es escribir pues mejor que mejor.
Neogeminis
Posted at 20:58h, 23 abrilY no se le ocurre pensar a esa mujer que el resultado de esa clonacion será un humano individual y diferente? Será que el ego y la vanidad tapa toda lucidez en cuanto se rompen los límites de lo moralmente cuestionable? Me quedo pensando. Un abrazo
marcosplanet
Posted at 08:23h, 24 abrilHas dado en el clavo y en el centro de una reflexión profunda: el libre albedrío de un humano clonado. ¿Realmente lo tendría? ¿O sería una copia perfecta, somática y mental, del original?
Podríamos abrir debate…
Otro abrazo para ti, Mónica.
campirela_
Posted at 18:54h, 23 abrilSoy Campirela_ salí como anónima jaja.
Anónimo
Posted at 18:52h, 23 abrilBuenas tardes, Marcos , excelente aporte ,me gusta el tema de la clonación , me has hecho recordar un libro que leí hace tiempo en el cual era el tema principal de la novela y fue muy interesante todo lo que leí en ella.
La ciencia avanza demasiado deprisa y estoy segura de que ya habrá más de un humano clonado.
Un abrazo, feliz tarde.
Muy bien esa colección de libros que nos dejas.
Cabrónidas
Posted at 11:38h, 23 abrilLos nazis ya pensaban en hacer este tipo de transgresiones, aunque dicen que se quedaron a medio camino. Cremoria es la prueba de que puedes tener aficiones nobles y a la vez ser despreciable.
ue nos permite soñar
Posted at 11:05h, 23 abrilHola Marcos, estupendo relato. La literatura es una válvula de escape de las rutinas diarias que nos permite evadirnos y soñar. como a tu protagonista, aunque saltarse los límites de la ciencia tiene un coste y unos riesgos…
Un abrazo!
marcosplanet
Posted at 16:08h, 23 abrilPor favor dime quién eres. Revisa tu identificación, pues sales como «ue nos permite soñar»
Marifelita
Posted at 10:24h, 23 abrilHola Marcos!
Gracias por participar en la propuesta juevera de nuestro grupo «El Vici Solitari»! Me ha encantado tu historia, tan imaginativa, ¿que es la literatura sin imaginación, suspense y aventuras? Cremoria, la protagonista sin duda es una amante de la lectura, y parece ser que ya tiene un plan ideado para disfrutar de la vida de otra manera! Un abrazote!
Beatriz
Posted at 21:27h, 21 abrilHola, Marcos. Me ha gustado tu relato, me parece una reflexión muy acertada de los límites de la ciencia y como nos gusta a los humanos jugar a ser dios.
La protagonista parece al principio atrapada en un sistema rutinario y deshumanizado, que encuentra en la literatura un escape, para más tarde acabar formando parte de la misma locura que su amigo el científico.
Es un texto que me ha hecho pensar también en los riesgos que tiene manipular ciertas cosas sobre las que, en realidad, no se tiene control.
Un abrazo!!